Elegir el vestido de novia es una de las tareas más difíciles para quienes están a punto de casarse, y una de las primeras preguntas que deben resolver es el diseño y después su color.
El color del vestido tiene que estar acorde a la novia, pues cada persona tiene una paleta particular de colores naturales, determinada por el tono de su piel, sus ojos, su cabello y sus cejas.
A continuación te damos los tips para reconocer tu tipo de piel y así saber si eres una novia de blanco o una de crudo.
Si tu piel es blanca, pura y lechosa, o blanca con leves tonos rosados. O si es oscura con tonos azulados, y el color de tu pelo, cejas y pestañas es oscuro bien definido y contrasta con tu piel, eres una novia definitivamente de blanco, el blanco hueso, tiza, el blanco hielo o el blanco agrisado. En los accesorios metálicos, los indicados serán el plata, los plateados brillantes o el plata mate claro.
En cambio, si tu piel es beige dorado, amarillenta casi oscura o siempre tiene un aspecto tostado, trigo o levemente bronceado -los tonos dorados define la calidez de tu piel-. O si el color de tu pelo es castaño claro, castaño oscuro, rubio con tonos dorados, pelirrojo o negro con luces cálidas o caoba, más bien eres una novia de color crudo o natural. También puedes ir de manteca, champagne, ivory o durazno claro. Para los accesorios, serán mejor los dorados y bronces.
Vestidos de Susan Ananias Novias
correo: susanananias@hotmail.com
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